El Metropolitano de Granada es una de esas obras que dejan huella en una ciudad, tanto por la molestia de sus obras como por el impacto que genera una vez puesto en marcha. Este proyecto viene siendo denostado por parte de la sociedad granadina, esa parte malafollá, quejica y amante del cemento y el tráfico privado como paradigma del progreso y que votará sin remedio al peor alcalde que ha tenido esta ciudad y que es el primero que anda poniendo trabas en el desarrollo de un sistema eficiente de transporte público. Pese a todos ellos, el proyecto sigue adelante, poco a poco, pero sin pausa, y puede representar un avance considerable en el transporte público de nuestra ciudad. Ahora bien, hay que hacerlo bien, y seguir progresando en su ampliación hacia el centro de la ciudad y hacia otros municipios del Área Metropolitana, así como un nuevo y eficiente diseño de las líneas de autobuses, complementario a la red de tranvias. Y a pesar de que siempre he defendido el trazado por superficie, frente a los que creen que por arriba solo deben ir los vehículos privados y no los peatones o los tranvías, ahora lo que deseo es que las obras acaben cuanto antes y sin sobresalto, que ya los dos años de espera que restan son suficientes.
Expongo aquí algunas fotos sacadas el día de hoy y que muestran el estado actual de las obras del metro a su paso por el barrio del Zaidín, desde la salida del soterrado en la Avenida de América hasta el puente que une este barrio con el Campus de la Salud. Sirva este documento para compararlo en un futuro, cuando el Metropolitano esté cruzando esta zona transportando ya viajeros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario